A vísperas del feriado por el Día de los Difuntos y la Independencia de Cuenca; como ya es costumbre el país se apresta a vivir cuatro días de asueto y a pesar de que este año será diferente por la emergencia sanitaria que atraviesa el país, las costumbres y tradiciones de las familias latacungueñas siguen intactas.
Es por eso que los comerciantes del mercado cerrado El Salto desde hace varios días alistan los productos más requeridos en esta fecha tradicional como son: el mortiño, babaco, mora, naranjilla, piña, frutilla, entre otros aderezos que dan sabor a la colada morada.
Sin embargo, sostienen que para este año las ventas se redujeron notoriamente y están conscientes de que el feriado de finados no mejorará su situación económica debido a que están suspendidas las clases presenciales y los eventos masivos.
Aseguran que los precios de los ingredientes para preparar esta bebida típica están económicos, a excepción del mortiño y la piña, por lo que invitan a ingresar al mercado cerrado y reactivar la economía local.
“No solo compren a los informales, ingresen al mercado”, resaltó Blanca Mullo, comerciante del lugar, quien añadió además que sus ventas se vieron perjudicadas porque durante el confinamiento porque se abrieron nuevas plazas en diferentes puntos de la ciudad y se quedaron instauradas.
De su parte Sara Velasco, comerciante de la sección hierbateras, se refirió a los arreglos de la tubería que realiza el Municipio de Latacunga para evitar que el agua baje desde el patio de comidas hasta el subsuelo, “los trabajos eran necesarios, puesto que el agua se desbordaba por las tuberías y generaban mal olor, y no hemos tenido dificultades porque esto se desarrollaba en la noche”, dijo.
Para Janeth Zumba, comerciante de la sección frutas, el golpe en cambio se ha sentido más fuerte en su sección, porque han tenido poca afluencia de sus clientes, “les invitamos a que nos visiten y no tengan miedo de un posible contagio. Nos encontramos acatando todas las medidas de bioseguridad”, agregó.