Los directivos no descartan presentar acciones de protección en contra de los acusadores.
El lunes 5 de diciembre, cerca de dos mil personas de la zona rural de Latacunga, llegaron hasta la Gobernación de Cotopaxi, para leer un manifiesto en el que, exponían la situación complicada en los campos debido a las sequias. En el documento se pedía la suspensión de los vuelos que realiza la Escuela de Aviación que funciona en el Aeropuerto Internacional Cotopaxi.
El pedido se genera debido a que, según los moradores de parroquias como Guaytacama, Eloy Alfaro, entre otras, las avionetas aparecen cunado va llover interrumpiendo el ciclo natural de la lluvia. “No puede ser una coincidencia, ello apareció después que se destruyeron los cañones antigranizo en una broclolera”, dijo Apolinario Yánez, dirigente comunero de Patután y líder de las manifestaciones.
Según Yánez las lluvias se ausentan justo en las cercanías de las grandes empresas brocoleras. De ahí sospechan que se modifica el ciclo de lluvia para no perjudicar estas grandes plantaciones cuya siembra se echa a perder producto de las granizadas o fuertes lluvias.
Ante estas acusaciones, directivos de la Escuela de Aviación, hablaron ante los medios el jueves 9 de diciembre. A la rueda de prensa asistió Mishelle Lalama, gerente general, quien lamentó que este tipo de aseveraciones estén dañando la imagen de la escuela de formación de pilotos que nada tiene que ver con el agro.
Jorge Panchig, gerente operaciones de Ecuatoriana de Aviación, explicó que las acusaciones los afecta al punto que ya habría una agresión a uno de los estudiantes. Habló del calentamiento global y la afectación al medio ambiente, como principal responsable de la sequias.
Pero también dijo: “El problema de fondo aquí son las brocolelas y si ese es el problema de fondo, realmente la gente debería irse a las brocoleras, no donde nosotros que no tenemos nada que ver. Hasta ahora no veo que haya una manifestación contra las brocoleras, no se ha dicho nada”.
Reclamó que están enfrentado una dificultad que no les corresponde. Añadió que el año electoral suele ser la antesala de estos conflictos.
Panchig explicó que sí existen aviones de fumigación, pero ellos están en la costa, cuyas avionetas tienen aspersores, pero se usan trajes especiales y todo un protocolo para su utilización.
La Gerente General leyó un comunicado, donde se rechazó categóricamente las acusaciones y también el proceder del alcalde de Latacunga, Byron Cárdenas quien aseguró que iba dirigir un documento a la Dirección General de Aviación Civil (DGAC), para solicitar la suspensión de la Escuela de Aviación en territorio.
A una semana de firmado el borrador del documento no se conoce si este fue entregado o no.
La Escuela de Pilotos tiene una existencia de 80 pilotos, al momento cuentan con 50 estudiantes de todo el país que viven en Latacunga. Los vuelos se realizan de lunes a domingo de 08:00 a 22:00 se cierra el aeropuerto, no realizan operaciones en la madrugada.