Foto: Nelson Sánchez, abogado en libre ejercicio
El 19 de octubre de 2017, el colectivo “El Molinero”, presentó una acción de protección, en contra del Municipio de Latacunga, por la construcción del distribuidor de tráfico de la Av. 5 de Junio, el cual en su fase precontractual y contractual tenía graves irregularidades, las mismas que han sido demostradas en el proceso constitucional, ante la Contraloría General del Estado y también la Fiscalía donde están llamados a juicio los funcionarios municipales, por el delito de tráfico de influencias, que fueron parte de la comisión que elaboró y aprobó los términos de referencia.
Uno de los problemas graves que tiene esta obra es el diseño, que no es adecuado, donde se ha privilegiado a los vehículos y no al peatón, por lo cual el Juez, estableció la vulneración de cinco derechos constitucionales y varias medidas de reparación, entre ellas la construcción de una acera junto al cementerio, donde jamás se planificó la misma y desde la apertura de ese hueco, ha puesto en peligro la vida de quienes transitan por el lugar, lo cual no les importó a los políticos que gestionaron la obrita, ni tampoco a los constructores quienes no sufren las consecuencias de sus decisiones.
Sin embargo, los ciudadanos y pobladores del sector que cada día se jugaban la vida al pasar por el espacio sin vereda, siguieron luchando; y, cuando la lógica y la razón está de su parte, la justicia debe cumplir con su cometido, y es por lo que, aplicando las normas vigentes, y al notar que el Municipio no cumplía con la disposición del juez, se ordenó que el expediente se traslade a Quito, a la Corte Constitucional, para que se juzgue el incumplimiento de una orden de autoridad competente, con lo cual, el municipio recién tomó en serio la petición y se puso a correr para cumplir con la disposición.
Cincuenta y tres meses después del inicio de la obra, al fin tenderemos la vereda, para que las personas puedan transitar con seguridad. Esto es una victoria para la participación ciudadana, que demuestra que, trabajando seriamente, con la razón de su lado, los pobladores podemos incidir en las políticas públicas, y hacer que los que se creen intocables luego están respondiendo ante la justicia.
Que sea un ejemplo para los funcionarios públicos, que deben cumplir sus obligaciones con honestidad, transparencia y pensando en el bien común, no en sus intereses. (O)
